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De los higaditos dicen que aportan hierro. Ya, ya sé que a muchos no les gusta. A mí tampoco me agradaba y cuando cría, menos. De todos modos, con el tiempo, alimentos que nunca nos atrajeron, pasan a ser nuestros favoritos. Creo que depende mucho de cómo vayamos acostumbrando nuestro paladar y de la preparación del plato. Ahora bien, me encanta encebollado. Ya lo comenté en otra receta: cebolla e hígado, de la mano, juntos.

Higaditos de pollo en salsa
Ingredientes para 4 personas: 2 cebollas hermosas cortadas en trozos grandes, 1 zanahoria cortada en dados, 2 dientes de ajo bien picados, perejil troceado, 1 bandeja de higaditos de pollo, aceite de oliva, 350 de vino blanco, 110 de brandy, 1 hoja de laurel y sal gorda.
Elaboración tradicional: en un recipiente para cocinar ponemos el aceite y la cebolla. Cuando comience a adquirir color, añadir los ajos. Al momentito, las zanahorias y removemos bien. Salar y seguir removiendo con cuidado de que no se queme nada. A los 10 minutos, más o menos, introducir los líquidos y 1 hoja de laurel. Transcurridos otros 10 minutos, los higaditos y el perejil. En cuanto vuelva a hervir, bajar el fuego y tapar, mantener así unos 15 o 20 minutos más. Siempre vigilar para confirmar que la carne se ha hecho bien y no pasarla.
Elaboración en Thermomix: lo primero de todo, poner la mariposa y luego el aceite, 4 minutos y medio, velocidad 1, temperatura varoma. Transcurrido este tiempo, incorporar la cebolla durante 6 minutos, velocidad 1 y temperatura varoma. Añadir los ajos, 2 minutos, velocidad 1, varoma. Ahora las zanahorias, 4 minutos, varoma, velocidad 1. Al finalizar los 4 minutos, verter los 110 ml. de brandy, 350 ml. de vino blanco, sal gorda y la hoja de laurel, 10 minutos a velocidad 1, temperatura varoma y cubilete (ya comenté que no puedo tomar alcohol, quizá ustedes sí, con lo cual se pueden saltar estos 10 minutos). Añadir los higaditos y el perejil y programar 20 minutos, varoma, cuchara, giro a la izquierda. Se puede servir con arroz, papas (patatas) guisadas o fritas, según les guste.
¡Muchas gracias por la visita!
Fijate no suelo cocinar con los higaditos de pollo, a ver, para ser sincera los utilizo para hacer paté pero no así, tendré que decidirme porque el hígado tiene mucho hierro y esta es una buena receta.
Besitos.
ELX
Rous a mi los higaditos me gustan mucho y siempre los preparo la próxima vez los voy a preparar así , me parecieron muy ricos.
Besos
Yo ya era rara de niña porque me gusta el hígado de siempre… y estoy de acuerdo en que el higado y la cebolla son muy buenos amigos! Si te gustan los de pollo tengo en mi blog un pate hecho con ellos riquísimo… casi tanto como este plato tuyo de hoy.
Con esos "acompañantes" los higaditos deben estar de fiesta y quien se los come ni te digo.
Pues yo creo que a mi Barbas esto le encantaría. Yo sólo como hígado de pato… Si encebollado queda tan rico como el de pollo, me apunto. Un besote.
Qué rica receta!!! tiene que estar muy rica. Con toda esa verdurita y esa salsa tan buena.
Besitos,
No acostumbro a comer hígados porque dicen que es como un colador a donde van a parar todo lo malo que tenga el animal. Pero los de conejo me encantan y alguna vez no puedo evitar comerme uno. En casa me miran "raro", ja, ja… Así que si preparo este plato me echan de casa!!!!
Nunca he comido hígados con cebolla, y esoq ue siempre he oído que es un plato riquísimo!
Besos
Hola, es una receta que hago de vez en cuando a mi marido que es el único que le gusta de la familia:( Solo que que no le pongo zanahoría y lo hago en una sartén a la antigua usanza. Y si un poco de pimienta blanca.
Probaré esta para que variar.
Un beso
Hola! Respecto al pare de higaditos… el alcohol puedes sustituirlo por caldo de pollo bien limpio en la gelatina, el picante si lo quitas ni se nota…
De chica comía higado, ahora mi marido me lo hizo una vez y si es bien preparado es una delicia.
Se aprecia muy sabroso, además los ingredientes lo dicen todo.
Besos y gracias por visitarme en mi blog.
MENUDA PINTA!!!!! QUE GUSTO, BESOS
ROUS, ME RECUERDA A UNOS QUE PREPARABA MI MADRE DE FORMA MUY PARECIDA.
LA VERDAD ES QUE ESTOS TUYOS TIENEN UNA PINTA ESTUPENDA.
BESOS
Elx,yo tengo pendiente el hacer paté. A ver si me atrevo un día que tú tienes unas recetas muy ricas. ¡Anímate y prueba a comerlos así!
¡Gracias, Annie!
Salomé, ya me di un salto por tu blog y me queda pendiente intentarlo. Ya te comenté en tu receta de paté que como no puedo poner ni el alcohol ni el picante me da no sé qué. Ya he leído tu propuesta de sustituir el alcohol por caldo. En cuanto me atreva a hacerlo, lo publicaré.
¡El Oteador de los Mercados, sí que lo disfrutamos!
Su, aquí me quedo pendiente de saber qué le parece a tu barbas y a ti ¡claro!
Suny Senabre, bueno, la verdurita le da un toque bastante bueno a la salsita y al hígado, vamos, para mojar pan estaba ¡ja, ja, ja,…!
Margarida, cierto, lo dicen y esa es la función del hígado pero también comentan que resulta muy beneficioso a la hora de aumentar el hierro. Así que ante la duda… ¡Ja, ja, ja,…! De todos modos, tú quieta no te vayan a sacar de casa.
Katy, qué pinta tiene tu opción. Hace años añadía una modificación que me encantaba, ahora no puedo, añadía una guindilla y le daba un toque tan ricoooo…
Kako, espero haberte aportado una idea para comerlo alguna vez más y que lo disfrutes. ¡Gracias a ti también por devolverme la visita!
¡Bocadoscaseros, gracias!
Elena, me alegra mucho traer a tu memoria esos recuerdos. ¡Gracias por darte un salto por aquí! Espero que sigas bien, guapa.
¡Gracias por seguirme y aportar vuestros comentarios! ¡Feliz fin de semana! Besos.
No soy yo muy de hígado, aunque es verdad que alguna vez y muy encebollado sí que lo como. Me gusta de sabor; pero cuando pienso lo que es, me entra un no sé qué… Boberías, lo sé, pero eso es lo que me sucede con el hígado.
Un besote
¡Ja, ja, ja,…! Laube, además de que eres de pescado más que de carne. Aunque no lo comparta sí que te entiendo porque a mucha gente le pasa lo mismo. Así que de boberías nada, cariño. Un besote enorme.
Rous, una delicia de hamburguesa. De esta no dejaba mi niña ni las miguitas. Ricoooooo.
¡Gracias, Nuria!